lunes, 21 de noviembre de 2016

Distintos Criterios a la Hora de Seleccionar a los Más Valiosos de las Grandes Ligas en el 2016


El Premio a los Jugadores Más Valiosos de las Grandes Ligas, MVP, por sus siglas en inglés, tal y como se conoce hoy día, comenzó a otorgarse por la Asociación de Escritores del Béisbol en 1931.

Sin embargo, la Asociación de Escritores nunca ha definido con precisión o claridad el alcance de la palabra valioso.  De ahí, que su interpretación está sujeta al análisis subjetivo de cada uno de los votantes.


Obviamente, el recipiente del premio debe haber tenido una destacadísima actuación, pero en la mayoría de las veces, ello, por sí solo no basta. Tradicionalmente, además de la destacada actuación del pelotero, el premio está vinculado a los logros del equipo al que pertenece. Por ello, cuando los aspirantes al premio producen estadísticas bastantes similares, la “ratio decidendi “ expresión latina, que significa literalmente en español "razón para decidir”,  se inclina a favor del jugador cuyo equipo tuvo una mejor actuación. Esa relación vinculante o simbiótica entre la actuación del jugador y los logros de su equipo, ha jugado un papel decisivo en muchas votaciones.

Pero esa tesis no es nueva.  En el 1931, la Asociación de Escritores el Béisbol otorgó por primera vez el premio. Ese año, en la Liga Americana, el promedio de bateo de Babe Ruth fue de .373, conectó 46 jonrones, empujó 163 carreras, su slugging fue de .700 y su por ciento de embasarse  fue increíble, .495;  prácticamente la mitad de las veces que fue al cajón de bateo.  Los números de Ruth fueron asombrosos. La pregunta obligada, ¿ganó el premio? La respuesta, no lo ganó. El premio lo obtuvo  el lanzador zurdo, Lefty Grove, que concluyó con marca de 31-4 y 2.06 de efectividad.  Estadísticas también impresionantes. La diferencia, los Atléticos de Filadelfia, equipo al que pertenecía Lefty Grove terminó primero en la Americana (107 -45) y los Yankees, segundo (94-59).

Ahora bien, esa tendencia no es inflexible. En el 1987, Andre Dawson ganó el MVP en la Nacional  y su equipo, los Cubs de Chicago, terminó último en la División Este de la Nacional (76-85).  En el 2003, Alex Rodríguez se alzó con el galardón en la Americana  y su equipo, los Vigilantes de Texas, terminó último en la División Oeste  (71-91). Pero históricamente existe una relación vinculante entre la actuación del jugador y los logros de su equipo,.

Sin embargo, en el 2016, la votación para los premios Más Valiosos de la Asociación de Escritores del Béisbol fue muy interesante y antagónica. Los escritores que votaron en la Nacional utilizaron criterios distintos a los utilizados por los votantes de la Americana.  Los de la Nacional optaron  por los criterios tradicionales, no así los de la Americana que echaron a un lado el récord de ganados y perdidos de los equipos y evaluaron  la valía del pelotero para su conjunto, independiente del lugar donde finalizó la novena.Veamos.

En la Nacional, los tres finalistas jugaron para los equipos que terminaron primeros en  sus respectivas divisiones: Daniel Murphy (Washington),  Kris Bryant (Cubs) y Corey Seager (Dodgers).Mientras, Nolan Arenado, cuya actuación fue sobresaliente e inclusive, merecedora del premio Más Valioso, ni siquiera fue escogido entre los finalistas. Arenado fue líder en ambas ligas en carreras empujadas con 133, co-líder en jonrones en la Nacional con 41 y  su promedio de bateo fue de .294.  Sus números en esos tres departamentos, que son los que definen la mítica Triple Corona, fueron superiores a los del ganador del premio, Kris Bryant ( 39 HRS., 102 CE y .292).  A ello, hay que añadir  que fue segundo en slugging en la Nacional (.570) y que ganó el Guante de Oro por 4ta. ocasión consecutiva defendiendo la tercera base, la misma que patrulló con regularidad, Kris Bryant.  Desafortunadamente para Arenado, Colorado terminó con marca de 75-87. Fue justo el galardón otorgado a Bryant, pero Arenado, como mínimo, debió figurar entre los tres finalistas de la Nacional.  Lamentablemente, sus estadísticas y logros fueron empañados por las 87 derrotas de su equipo, lo que corrobora que los votantes de la Nacional utilizaron los criterios tradicionales; se inclinaron a favor de los jugadores, cuyos equipos encabezaron la tabla de posiciones. 

Dicho lo anterior, echemos ahora un vistazo a la votación de la Americana.

Contrario a la Nacional, en la Americana solamente uno de los tres finalistas militó en un líder divisional, Mookie Betts de Boston.  Los otros dos, José Altuve y Mike Trout, jugaron para equipos que terminaron tercero y cuarto en la división Oeste.

Trout, el sensacional jugador de Los Angeles, tuvo otra espectacular campaña. Fue líder en tres categorías ofensivas en las Grandes Ligas  y en ocho categorías en la Americana.  Encabezó las Grandes Ligas en carreras anotadas (123), bases por bolas recibidas (116) y por ciento de embasarse (.441). Además, fue el líder en ambas ligas en  WAR (“Win Above Replacement”) con 10.6.  Por la importancia que reviste el WAR, he creído prudente dedicar un párrafo para brindar una breve explicación de lo que significa.

El “Win Above Replacement” define mejor que ninguna otra estadística,  la valía de un jugador para su equipo. Para calcularlo se utilizan fórmulas que evalúan los distintos aspectos del juego con el propósito de medir la contribución de un jugador a las victorias de su equipo por encima de un reemplazo. Más que una simple estadística, es una estructura, una ecuación. Debido a la multiplicidad de factores que se utilizan para calcularlo, la fórmula no está estandarizada. Por ello, Fangraphs, Baseball-Reference, Baseball Prospectus, utilizan sus propias métodos para calcular el WAR, con resultados ligeramente diferentes.

Volviendo a Trout, debutó en las mayores en el 2012 y  ha sido el líder en WAR en los cincos años de participación en la Gran Carpa. Por ello, se convirtió este año en el segundo jugador de la Americana que lidera en cinco temporadas consecutivas ese departamento; el otro, Babe Ruth.

Trout, considerado el jugador más completo del béisbol, terminó segundo en la votación para el Más Valioso de la Americana en su primer año, 2012,  y su equipo terminó tercero en el Oeste. Terminó segundo nuevamente en el 2013 y su equipo volvió a terminar tercero en el Oeste. En el 2014, por fin obtuvo el premio Más Valioso y no fue coincidencia que su equipo terminara primero en el Oeste; más aún, fue el equipo más ganador en las Mayores ese año con 98 victorias. En el 2015, volvió a terminar segundo en la votación y su equipo terminó tercero en el Oeste.  

Este año tuvo otra fabulosa campaña; no así su equipo que terminó cuarto en el Oeste con marca de 74-88.  Las 88 derrotas de su equipo presagiaban que por cuarta ocasión en cinco años llegaría segundo en la votación porque, aunque sus logros eran incuestionables, su rival Mookie Betts, también tuvo una temporada colosal y su equipo, las Medias Rojas de Boston, arribó primero en la complicada División Este.

Mookie Betts floreció, tal y como se esperaba. Fue líder en total de bases con 359, segundo en bateo con .318,  anotó 122 carreras (una menos que Trout), empujó 113, trece más que Trout, se robó 26 bases en 30 intentos (87%), conectó 31 jonrones (dos más que Trout), ganó el guante de oro y su WAR fue de 9.6 (un punto menos que Trout).  Además, Boston ganó 93 juegos.  

Aunque Trout superó por setenta y ocho centésimas (.78) a Betts en por ciento de embasarse (.441-.363) y en slugging (.550 - .534), el primer lugar de Boston en el Este parecía inclinar la balanza a favor de Betts.  Pero esta vez, los votantes de la Americana, optaron por no atribuirle tanta valía al primer lugar de Boston en el Este. Por el contrario, optaron por utilizar como  ratio decidendi  la valiosa aportación Trout a su equipo independientemente de las victorias o derrotas.  El resultado de la votación le hizo justicia a Trout que produjo, de una u otra manera, el 17% de las carreras de su equipo y no tuvo control de las aportaciones de sus compañeros. Por ello,  uno de los más sorprendidos por la votación fue el propio Trout que señaló que no lo podía creer, no porque dudara de sus logros, sino por la tendencia de los escritores a votar por un jugador de un equipo ganador. Inclusive, luego de conocer que había ganado el premio, expresó: “estoy viviendo una experiencia surrealista”.

Mookie Betts también hubiese sido un digno ganador del premio, pero sin restarle mérito, su equipo tuvo aportaciones significativas de David Ortiz, Dustin Pedroia, Xander Boggarts y Rick Porcello, entre otros. 

En resumidas cuentas, este año, y a todas luces, los criterios que utilizaron los votantes de la Nacional y de la Americana fueron diametralmente opuestos.

En Hora Buena para Trout porque, no solamente estamos en presencia del jugador más completo del béisbol, estamos en presencia de un jugador generacional y uno de los mejores de todos los tiempos.  A manera de ejemplo, y para concluir, a los 24 años (cumplió los 25 el 7 de agosto de 2016) produjo 51 jonrones más que Bonds a esa edad (168-117) y 28 más que Henry Aaron (168-140). En sus primeras cinco temporadas conectó 917 hits, 18 más que Pete Rose en sus primeros cinco años (917-899).

martes, 1 de noviembre de 2016

CORTOS DE LA SERIE MUNDIAL - SEGUNDA PARTE


En la victoria de los Cubs, 3-2, el lanzador que inició y perdió el juego por Cleveland, Trevor Bauer, lanzó cuatro entradas en las que permitió tres carreras. Con su actuación de anoche, Bauer se convirtió en el primer lanzador que inicia cuatro juegos en una postemporada y en ninguno de ellos tira cinco entradas completas.







Los Cubs consumieron 26 entradas ofensivas en los tres juegos que se celebraron en el Wrigley Field y en 23 de ellas, los lanzadores de Cleveland le colgaron ceros (26-23). Afortunadamente para los Cubs, en la cuarta entrada del juego de ayer (5to.), marcaron las tres carreras, que le permitieron derrotar a Cleveland, 3-2, y mantener vivas sus esperanzas.





Aroldis Chapman no solamente defendió la ventaja de una carrera, sino que se anotó un salvado de ocho outs. Ese fue el salvado de mas entradas lanzadas por Chapman (2 2/3), y a su vez en el que efectuó más lanzamientos (36).
Por esas curiosidades de la vida, solamente en una ocasión anterior, Chapman había trabajado más de dos entradas en un desafío; ello ocurrió el 9 de julio de este año cuando lanzaba para los Yankees y fue precisamente contra Cleveland. Ese juego se encontraba empate a seis carreras en la novena cuando con dos outs, Chapman entró a relevar y colgó el cero. El juego se extendió a entradas extras y los Yankees marcaron una carrera en la entrada once para ganar 7-6. Chapman se apuntó la victoria al colgar ceros en la décima y undécima entrada. En total lanzó 2 1/3 de entradas. ¿A quién relevó Chapman en la novena entrada? Para tristeza de los Yankees, a Andrew Miller. ¿Chapman relevando a Andrew Miller para ganarle a Cleveland? “¡Cosas veredes mi amigo Sancho!”



jueves, 27 de octubre de 2016

CORTOS DE LA SERIE MUNDIAL

Corey Kluber,  Andrew Miller y Cody Allen no estuvieron entre los siete serpentineros de Cleveland que desfilaron por la loma de lanzar y los Cubs empataron la Serie Mundial a una victoria por equipo.  Y es que ese trío ha lanzado más de la mitad (46 2/3) de las 89 entradas de Cleveland en la postemporada y su  efectividad combinada es de 0.39.




Una de cal y una de arena; los siete lanzadores que utilizó Cleveland en el segundo juego de la Serie Mundial, otorgaron ocho bases por bolas, pero también poncharon a ocho contrarios.  Ahora el cuerpo monticular de Cleveland ha ponchado a ocho bateadores o más en cada uno de los 11 juegos de la postemporada, empatando una marca de ocho ponches o más en juegos consecutivos de la postemporada.


En la misma primera entrada del segundo desafío de la Serie Mundial, los Cubs anotaron una carrera, para irse al frente 1-0, ventaja que no perdieron en el resto del desafío en ruta a la victoria 5-1.  Y es que las probabilidades de ganar del equipo que anota primero son enormes en esta postemporada.  Cleveland tiene marca de 7-0 cuando anota primero y los Cubs 7-1.  



Contra todos los pronósticos, el joven de 23 años, Kyle Schwarber, apareció de la nada al mejor escenario del béisbol, la Serie Mundial.  En el primer juego conectó un doble, convirtiéndose en el único jugador de posición, que su primer hit de la temporada se produce en la Serie Mundial.  Anoche, en el segundo juego, conectó dos sencillos impulsadores de carreras y recibió un boleto gratis en cinco presentaciones al plato.  Está bateando en la Serie Mundial para .429, se ha embazado en cinco de sus nueve presentaciones al plato con un doble, dos sencillos y dos empujadas.  El año pasado, en su primera participación en una postemporada, conectó cinco jonrones en apenas 27 turnos, estableciendo, de paso, la marca de cuadrangulares para un jugador de los Cubs en la postemporada.



Ahora la Serie Mundial se traslada al mítico y legendario Wrigley Field de Chicago.  En ese estadio, y durante la temporada regular, los Cubs ganaron 57 juegos y perdieron solamente 24 (57-24).  Ese fue el mejor récord de ganados y perdidos de un equipo jugando como local este año en las Grandes Ligas; más aún, los 57 triunfos son la mayor cantidad de victorias obtenidas por un equipo de los Cubs en ese estadio.  Como si fuera poco, los Cubs envían a la loma de lanzar a Kyle Hendricks, líder en efectividad de las Mayores (2.13), y su efectividad en el Wrigley Field este año fue de 1.32. 


La rotación abridora de los Cubs, no solamente fue la mejor de las Grandes Ligas (2.96), sino la más profunda.  Por ello, se dieron el lujo de dejar a un ganador de 15 juegos, Jason Hammel (15-10), fuera del roster de la Serie Mundial.  La rotación abridora de los Cubs para la Serie Mundial:  Jon Lester, Jake Arrieta, Kyle  Hendricks y el veterano John Lackey.







viernes, 21 de octubre de 2016

Jóvenes y Talentosos

Impresionante el talento joven de los Cubs en el Cuadro Interior.  Su campo corto, Addison Russell, tiene 22 años.  La segunda base, Javier Báez, tiene 23 años.  El tercera base, Kris Bryant, tiene 24 años. El receptor, Wilson Contreras, tiene 24 años y el primera base, Anthony Rizzo tiene 27 años.   

SABIA DECISIÓN DE LOS CUBS

Para diciembre del año pasado (2015), los Cubs tenían tres talentosos “shortstop” que tenían 25 años o menos; Starlin Castro (25 años), Javier Báez (23 años) y Adisson Russell (21 años). A pesar de las múltiples y tentadoras ofertas de cambio que recibieron en torno a Javier Báez, optaron por desprenderse de Starlin Castro, que en su segunda temporada en la Gran Carpa fue el líder en “hits” en la Liga Nacional con 207 y quien, además, había participado en dos Juegos de Estrellas. Los Cubs retuvieron a Russell y a Báez, y anoche, en el importantísimo quinto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional con el juego empatado a una en la sexta entrada, Báez abrió con “hit” y Russell la sacó del parque para darle ventaja 3-1 a su equipo, ventaja que no perdieron en el resto del desafío. Eventualmente, Báez y Russell se combinaron para conectar 5 incogibles, anotar 3 carreras, empujar 5 y colocar a Chicago a las puertas de la Serie Mundial.
Además, con dos joyas defensivas, Javier Báez dio cátedra de fildeo. De hecho, varios jugadores de los Cubs señalan que Báez es el mejor jugador defensivo del equipo y capaz de ganar guantes de oro en segunda, en tercera o en el campo corto. A ello, hay que añadirle que los tres “hits” y las tres carreras que empujó ayer (5to juego de la serie), lo colocaron como el mejor bateador de los Cubs en la postemporada, con promedio de .371 (35-13), es el líder en “hits” con 13, en empujadas con 7, en bases robadas con 2, co-líder, junto a Dexter Fowler, en anotas con 7 y co-líder en "slugging", junto a Kris Bryant, (.571).
Su extraordinario desempeño en la temporada regular y en la postemporada evidencia que la decisión de los Cubs fue sabia y astuta. ¡EN HORA BUENA!

martes, 31 de mayo de 2016

¡¡¡Cosas veredes mi amigo Sancho!!!‏

Jason Hammel comenzó lazando por Chicago (30 de mayo de 2016), en la victoria sobre los Dodgers, 2-0.  Hammel tiró las primeras dos entradas en cero y permitió el único hit de los Dodgers, pero no pudo continuar lanzando por calambres en el tendón de su corva derecha.  Fue en ese escenario que cuatro relevistas de los Cubs se combinaron para lanzar siete entradas perfectas al retirar a los 21 bateadores que enfrentaron. Travis Wood lanzó tres entradas (4ta, 5ta y 6ta), Justin Grimm lanzó la 7ma, Pedro Strop, la 8va y Héctor Rondón, la 9na.

La perfección del relevo de los Cubs (siete entrada) evoca lo ocurrido el 23 de junio de 1917, en el Fenway Park de Boston.  Aquel día, comenzó lanzando por las Medias Rojas de Boston, Babe Ruth, quien otorgó boleto gratis al primer bateador de los Senadores de Washington, Ray Morgan.  Molesto con el conteo de bolas y strikes, Ruth discutió agriamente con el arbitro principal, Brick Owens, e inclusive, lo empujó.  Ruth y su compañero de batería, el receptor Pinch Thomas, fueron expulsados del juego, por lo que Boston se vio obligado a traer un nuevo lanzador, Ernie Shore y a un nuevo receptor, Sam Agnew.  Así las cosas, mientras Ernie Foster, segundo en el orden al bate de Washington, consumía su turno, Ray Morgan salió al robo de la segunda y fue fusilado con un certero disparo del receptor Agnew.  De ahí en adelante, Ernie Shore retiró a los 26 bateadores que enfrentó.  Boston ganó cuatro a cero (4-0).  A pesar de que para los efectos de las estadísticas se le acreditó a Shore haber propinado 27 “outs”, ya que el out de Morgan  (intentando robar), se produjo cuando éste ya estaba en la loma, no se le adjudicó un juego perfecto debido a la base por bola por bola que otorgó Ruth. Tampoco se le anotó a Shore un juego completo. Sí se le acreditó a Shore, la blanqueada conforme a la Regla 10:18 y un juego sin hits, ni carreras, combinado con Ruth.


jueves, 19 de mayo de 2016

¡Iván y Yadier, dos colosos detrás del plato!

En la victoria de los Cardenales (18 de mayo de 2016), sobre Colorado 2-0, Yadier Molina recibió las nueve entradas, estableciendo una marca de entradas recibidas entre los receptores de San Luis, con 12,334.Yadier participa en su decimotercera campaña. El receptor con más entradas detrás del plato en las Grandes Ligas, lo es Iván Rodríguez con 20,348 en 21 campañas; 8,014 más que Yadier. La marca de Iván luce insuperable. En once de sus 21 campañas, Iván estuvo detrás del plato en más de mil entradas. Mientras que Yadier tiene mil entradas o más detrás del plato en ocho de sus doce temporadas previas y ésta debe ser la número nueve (2016), ya que lleva 313 1/3 de entradas. Yadier podría alcanzarlo, pero va a ser muy difícil por lo siguiente:

1. Yadier nunca ha superado las 1,200 entradas detrás del plato en ninguna temporada; su mayor cantidad fue de 1,176 2/3 en el 2009. Mientras que Iván superó las 1,200 entradas en tres ocasiones; 1,223 1/3 en el 1996, 1,208 1/3 en 1999, año en que también fue el Más Valioso en la Americana, y 1,201 en 1997.

2. Asumiendo que en la campaña en curso, Yadier alcance las mil entradas, requerirá ocho temporadas adicionales con 914 entradas en cada una de ellas detrás del plato, con el agravante de que en su temporada número diecinueve tendrá 40 años, en la veinte, 41 años y en su temporada número 21, tendrá 42 años (nació el 13 de julio de 1982). Iván tenía 39 años cuando jugó su vigésima primera (21) y última temporada, 2011 y estuvo detrás del plato en solamente 304 2/3 de entrada.






jueves, 12 de mayo de 2016

Fascinante la Histórica Rivalidad entre Utuado y Camuy, particularmente en la Post-Temporada del Béisbol Doble A



El primer juego de la pelota Doble A se efectuó el domingo, 19 de mayo de 1940, en el Sixto Escobar, las novenas; Santurce Giants y Red Stars.  Ese primer torneo contó con 39 equipos, uno de ellos, el Utuado Stars, que terminó con marca de once victorias y una derrota (11-1) en la Serie Regular.  Al año siguiente, 1941, Utuado se proclamó Campeón de Puerto Rico, por lo que ostenta el título nacional más antiguo entre los equipos activos en la Doble A.  Luego de ello, Utuado recesó y se  reintegró nuevamente a la pelota Doble A en el 1954.  Desde entonces, ha participado ininterrumpidamente en 63 campañas.
Por su parte, el Camuy Arenas ingresó al seno de la Doble A en el 1957 y ha participado en 60 temporadas consecutivas.
Desde sus primeras confrontaciones en el 1957, Camuy y Utuado comenzaron a tejer una de las más antiguas y aguerridas rivalidades del Béisbol Doble A.  Durante más de medio siglo, ambas novenas han librado múltiples “batallas” en los diamantes del Ramón Cabañas de Utuado (antiguo y actual) y en el Juan Francisco “Cheo” López de Camuy. Sus épicas confrontaciones cimentaron una apasionante y amistosa rivalidad entre ambas novenas y sus respectivas fanaticadas.
En la Post-Temporada la porfía se acrecienta. Se han enfrentado en trece Series de Post-Temporada; ocho de ellas en Semi Finales, cuatro veces en Finales Seccionales y en una ocasión (2007) en el Carnaval de Campeones. Utuado ha ganado nueve de las trece series y Camuy cuatro. Al final del artículo presento una Tabla que recoge las trece series y que fue preparada por el querido amigo e historiador del Camuy Arenas, Eurípides ("Euri") Martínez, que dicho sea de paso, es sobrino de Don "Cheo" López, quien fue el primer apoderado de Camuy.
Estas dos novenas han dominado la región en los últimos trece años (2003-2015). A partir del 2003, Utuado ha obtenido ocho títulos seccionales (2003, 2006, 2007, 2009, 2010, 2011, 2012 y 2014) y Camuy tres (2004, 2005 y 2015).  Más aún, han sido los protagonistas de las últimas cuatro Finales del Norte. Utuado se proclamó campeón en el 2011, 2012 y 2014, y Camuy destronó a Utuado en el 2015.
Como recordarán, en el 2013, no hubo Final Seccional, ya que la Federación de Béisbol utilizó un formato distinto mediante el cual dos equipos del Norte, en vez de dirimir una Final Seccional, enfrentaron a dos equipos del Metro, en el llamado Cruce de Secciones. Precisamente, Utuado y Camuy fueron los equipos que representaron al Norte. 
Echemos un vistazo a las cuatro Finales Seccionales en las que se han enfrentado.
Final del 2011:
Utuado derrotó a Camuy en seis encuentros (4-2). En esa Serie, el utuadeño Javier Schelmetty, fue la figura más sobresaliente cuando en labor de relevo obtuvo tres de las cuatro victorias de los Montañeses. En trece entradas, solamente permitió tres carreras limpias, para un magnífico promedio de efectividad de 2.08. La otra victoria de Utuado se la apuntó el zurdo Víctor Montes. Hoy ambos lanzadores militan con los Arenosos de Camuy. 
Final del 2012:
Sin lugar a duda, la más reñida, dramática y memorable Serie entre Arenosos y Montañeses. Tal y como se anticipaba, la Serie se extendió al máximo de siete partidos. Tres de esos partidos, concluyeron con el mismo marcador de 3 a 2. El viernes, 27 de julio de 2012, se celebró el séptimo y decisivo encuentro en el Ramón Cabañas de Utuado. Desde las 6:00 de la tarde, los fanáticos de Camuy, de Utuado y del béisbol Doble A, abarrotaron las tribunas del estadio. Antes de efectuarse el primer lanzamiento, las gradas estaban repletas y los bomberos cerraron las puertas del parque. Más de 3,500 personas presenciaron ese histórico encuentro. Tomás Rodríguez se enfrascó en un duelo contra el profesional Juan Padilla. El juego llegó 0 a 0 hasta la séptima entrada, cuando Camuy, aprovechando dos errores defensivos de Utuado, marcó dos carreras para irse al frente 2 a 0. En la parte baja de la séptima, Tomás Rodríguez le colgó otro cero más a los Montañeses, pero no salió a lanzar en la segunda del octavo, ya que había efectuado 115 lanzamientos y acusaba cansancio. El relevista zurdo Orville Avilés salió en su rescate y retiró al primer bateador. Acto seguido, vino a relevar el derecho Héctor Plaza, quien procedió a ponchar Ian Texidor para el segundo out. En ese momento, la fanaticada de Camuy cantaba a coro: “Cuatro outs más y no jugamos más”. Por su parte, la fiel y consecuente fanaticada de Utuado, dirigida por su animador Willy Picón replicaba: “Utuado no se quita, Utuado no se quita”. Fue en ese escenario que vino al cajón de bateo, Luis Cortés, quien había conectado tres hits en tres presentaciones al bate y en conteo de dos strikes y una bola, abanicó la brisa en un lanzamiento en curva para poncharse. Pero ocurrió lo inesperado; lo que parecía el tercer out fue el comienzo de una pesadilla para Camuy. El receptor de los Arenosos, Carlos Rivera, no pudo manejar el lanzamiento en curva y la bola se vino atrás y cuando el receptor pudo recoger la bola, ya Cortés anclaba en la segunda base. Oficialmente se anotó lanzamiento salvaje. El próximo bateador, Carlos Claudio, en conteo de tres bolas y dos strikes, conectó un hit al predio izquierdo-central empujando la primera carrera de Utuado. Acto seguido, Jensen Fonseca recibió boleto gratis, lo que provocó la salida del montículo del relevista Héctor Plaza y vino en su auxilio, Manuel Romero, quien procedió a otorgar boletos gratis a Orville Laureano y a Toño Candelaria. De esa forma, Utuado empató dramáticamente el juego a dos carreras. Jonael Barrios sustituyó a Romero y también le otorgó boleto gratis a Edwin Cancel, para empujar la carrera que le dio la victoria a Utuado, 3 a 2.  Hoy, Manuel Romero milita con Utuado.
Final del 2014:
Camuy salió favorito, amparado en un formidable elenco monticular encabezado por el zurdo profesional Miguel Martínez. Cuando Miguel enfrentó a Utuado en el primer partido de la Final, ostentaba marca 9-0 con 2 salvados. Pero Utuado descifró los envíos de Miguel desde la misma primera entrada, cuando los primeros tres bateadores le conectaron limpiamente. Al concluir la misma, Utuado había marcado tres carreras y con Julio Díaz en el "Box" se alzó con la victoria 4-0.  En el cuarto partido de la Serie, también celebrado en Utuado, Manuel Romero lanzó 6 1/3 entradas en cero y nuevamente los relevistas de Utuado maniataron la ofensiva de Camuy y Utuado volvió a ganar por la vía de la blanqueada, esta vez 1 a 0.
Con la serie 3 a 1 a favor de Utuado, Miguel Martínez, impuso su clase y blanqueó a Utuado 7 a 0, ponchando a quince bateadores y permitiendo solamente tres incogibles.  
El sábado, 28 de junio de 2014, en el sexto partido, Utuado se alzó nuevamente con el título del Norte, al derrotar 7 a 3 a Camuy.
Final del 2015:
Por cuarta ocasión consecutiva, se enfrentaron en la Final Seccional. La serie fue dominada de principio a fin por Camuy.  El primer juego lo ganó Camuy 4-3, amparado en un perfecto relevo de Miguel Martínez, quien lanzó tres entradas, retirando a los nueve bateadores que enfrentó,  cinco de ellos por la vía del ponche. El segundo juego fue un triunfo amplio para Camuy al son de 10-3. Utuado ganó el tercer juego, 14-2, apuntándose el camuyano, Manuel Romero, la única victoria de Utuado en la Serie.  Camuy, con otro espectacular relevo de Miguel Martínez, ganó el cuarto juego 4-2.  Martínez, lanzó cinco entradas en cero y ponchó a siete.  El viernes, 26 de junio de 2015, en el Ramón Cabañas de Utuado, Camuy eliminó a los Campeones de Puerto Rico cuando los derrotó 5-2, arrebatándole además, la Corona del Norte.  Nuevamente Miguel Martínez fue el verdugo de los "Montañeses" al pintar de blanco a Utuado durante cuatro entradas en relevo.  En la Serie, Martínez lanzó doce entradas en relevo en las que no permitió anotaciones a unos Montañeses que fueron los líderes en bateo a nivel nacional, .331. 
Carnaval de Campeones:
Además de esas cuatro Finales Seccionales, Utuado y Camuy se enfrentaron por primera y única vez en el Carnaval de Campeones del 2007. Ese año, Utuado fue líder de la sección Norte (14-5) y Camuy, que fue movido de sección, llegó segundo (10-9) en la Noroeste. En la Semi Final le barrió la Serie a Aguadilla (4-0). En la Final de Noroeste, enfrentaron a los Navegantes de Aguada y a pesar de tomar ventaja en la serie (3-1), perdió los últimos tres desafíos y Aguada se proclamó Campeón del Noroeste. Sin embargo, Camuy logró su pase al Carnaval de Campeones como Tarjeta Salvaje, gracias a su récord de (7-4) en la Post Temporada. Así las cosas, Utuado, que tuvo el mejor récord entre los siete campeones seccionales (22-6), enfrentó a Camuy, que ocupó el octavo lugar en la tabla de posiciones del Carnaval de Campeones. Utuado le barrió la Serie (4-0). Tonito Acevedo ganó el primer juego, 9-1, apuntándose la undécima victoria sin derrota (11-0), en el 2007. Dicho sea de paso, Tonito extendió a catorce su racha de victorias sin derrotas en esa campaña, antes de caer ante Cidra en el cuarto juego de la Final Nacional.
A medir Fuerzas Nuevamente estos dos Gladiadores del Béisbol:
Como si lo anterior fuera poco, a partir del próximo 20 de mayo de 2016, y por decimocuarta ocasión, Utuado y Camuy se enfrentarán en otra serie de Post-Temporada, ésta vez, en la Semi Final B del Norte. Durante la Serie Regular, Camuy, actual campeón del Norte, dominó a Utuado, tres victorias a dos (3-2). Los Arenosos cuentan con Miguel Martínez, que culminó la campaña con seis victorias sin derrotas (6-0), efectividad de 1.69, los contrarios le batearon para 1.79 y fue el líder en ponche del torneo con 85 en 64 entradas lanzadas.
En la Serie Regular, Miguel dominó nuevamente a Utuado al ganarle dos juegos (2-0), su efectividad fue de 2.25, los Montañeses le batearon para .228 y les ponchó 24 en 16 entradas.
De ahí, que para poder alzarse con el triunfo, Utuado viene obligado a derrotar a su némesis, Miguel Martínez.
Utuado estará dirigido por su nuevo mentor, Edwin Maldonado, y cuenta con dos de los mejores bateadores de la Doble A, Toño Candelaria (.394) y Héctor Ponce (.377). Además, añadieron a su Roster a los colegiales, José De la Torre (receptor) y Luis Torres (lanzador).
Definitivamente, los fanáticos que asistan a los estadios disfrutarán otro Clásico entre estos dos colosos equipos, que son banderas del Béisbol Doble A!!!


martes, 10 de mayo de 2016

Violación a la Regla del Béisbol sobre el Recorrido de las Bases‏

En el partido de anoche (9 de mayo de 2016), entre los Marlins de Miami y los Cerveceros de Milwaukee, se produjo una violación a la Regla 7.08 (h) del béisbol que prohíbe que un corredor rebase a otro que le precede en el recorrido de las bases.  Veamos el vídeo de la jugada y la explicación de cómo se aplica la regla.

En la segunda entrada del juego entre Miami y Milwaukee, el guardabosque dominicano de Miami, Marcell Ozuna, corría en primera base cuando el receptor J.T. Realmuto conectó un largo batazo por el jardín central.  Ozuna se quedó cerca de la primera base para iniciar un pisa y corre hacia segunda, previendo que el guardabosque central de Milwaukee podía capturar el elevado.  En los precisos momentos en que la bola superó la verja, extrañamente Ozuna viró a tocar la primera base para continuar el recorrido y al tocar la base,  el bateador-corredor Realmuto le pasó por el lado en el recorrido de base.  El árbitro de primera, Mike DiMuro, por estar mirando la trayectoria de la bola, no advirtió la violación.  Pero el dirigente de Milwaukee, Craig Counsell, sí se percató y solicitó la revisión. La repetición ilustró la violación y se aplicó la Regla 7.08(h),  que prohíbe a un corredor rebasar a otro que le precede.
La violación fue clara y la pregunta que procede es: ¿Cómo se aplica la Regla en esta situación particular?
Respuesta:  Al pisar la primera base, el bateador-corredor Realmuto se anotó un sencillo, pero al rebasar al corredor Ozuna en el recorrido hacia segunda, fue declarado out, por lo que nunca alcanzó la segunda base. De ahí, que solamente se le acredita un sencillo porque sí pisó la primera base válidamente.  ¿Y en cuanto a Ozuna? Aunque Ozuna propició la violación, puede correr libremente las bases porque él no rebasó a nadie. Por estar la bola al otro lado de la verja, le dio la vuelta al diamante y anotó carrera.
Resultado Neto: Se le acredita un sencillo a Realmuto y una carrera empujada.  A su equipo  Miami se le acreditó, en vez de dos carreras, solamente una.
Véase la jugada en: 
http://m.es.mlb.com/video/v679137183/anulan-hr-de-realmuto-tras-revision


viernes, 22 de abril de 2016

Jake Arrieta

En las últimas 5 campañas (2012-2016, en curso), a 18 de los 30 equipos de Grandes Ligas le han tirado un "no-hitters".

Anoche, Jake Arrieta, tiró el 2do. "no-hitters", en sus últimas 10 salidas.  El primero se produjo el 30 de agosto del año pasado (2015), en el Dodger Stadium.  Solamente dos lanzadores lograron "no-hitters" en menos salidas entre uno y otro;  Johnny Vander Meer, en salidas consecutivas, junio 11 y junio 16 de 1938;  y Warren Spahn, en un lapso de 5 salidas, septiembre 16 de 1960 y abril 28 de 1961.

Los Cubs conectaron 5 jonrones para respaldar a Arrieta.  La mayor cantidad de cuadrangulares que conecta un equipo en un "no-hitter".


Jake Arrieta, se convirtió en el 8vo. lanzador que logra "no-hitters" en temporadas consecutivas.  Sandy Koufax, lo hizo en 4 temporadas consecutivas (1962-63-64 y 1965); Nolan Ryan en tres (1973-74 y 1975).

Arrieta, es el 4to. lanzador que tira un "no-hitters", después de ganar el Cy Young; Koufax lo logró en 1964, Bob Gibson en el 1971 y Clayton Kershaw en el 2014.

Con el cuadrangular de ayer, Bryce Harper lleva 8 en 15 juegos. Es el 4to. jugador que lo logra luego de haber ganado el premio Más Valioso.  Los otros… Ted Williams, 8 en el 1950,  Barry Bonds, 8 jonrones en el 2002 y 9 en el 2004;  Pujols conectó 10 en los primeros 15 juegos del 2006.


jueves, 21 de abril de 2016

Los Yankees No Producen Ofensivamente en los Momentos Claves

Los Yankees se fueron ayer de 4-0 con corredores en posición de anotar en su derrota frente a Oakland 5-2.   En los últimos 8 juegos solamente han conectado 4 hits en 69 turnos con corredores en posición de anotar (0.58).  A ello obedece en gran medida que estén en el sótano del Este.

Mientras, Bryce Harper (Nacionales),  en esta temporada ha conectado 8 hits en 14 turnos con corredores en posición de anotar (.471).  Los 8 hits son extra-base, 4 dobles y 4 jonrones.  Por ello, es el líder en empujadas en Grandes Liga y su equipo tiene el mejor récord en las Mayores, 11-3.



Yadier Molina

Yadier, es un verdadero verdugo contra los Cubs en San Luis. En el juego de ayer, 20 de abril de 2016, entre los Cubs y los Cardenales celebrado en el BUSH STADIUM, Yadier conectó 2 hits en 3 turnos. Desde el 2010, Yadier ha jugado 50 juegos contra los Cubs en San Luis y su promedio de bateo en esos 50 juegos es de .433 (164-71). Ese es el promedio más alto entre todos los jugadores de Grandes Liga frente a un mismo oponente y en un mismo estadio.


La Mayor Velocidad Oficialmente Registrada por un Lanzamiento en el Béisbol de Grandes Ligas

En 1946, Bob Feller se convirtió en el primer pitcher cuya velocidad fue medida por una pistola de radar mientras lanzaba desde un montículo. Un cálculo revela que en tiempos actuales hubiera registrado una velocidad de 107.6 millas por hora.

En aquellos tiempos, no era una pistola de radar, como ahora es conocida, la que medía la velocidad de los lanzadores; se usaba un dispositivo de celdas fotoeléctricas de una base militar estadounidense que servía para determinar la velocidad de los proyectiles. Ya en la llamada “era moderna”, Nolan Ryan fue cronometrado, en 1974, con una pistola de radar utilizada por la policía y ahí marcó la sorprendente velocidad de 108.1 millas por hora, la cual no es tomada en cuenta como oficial porque todavía la pistola no era usada por las Grandes Ligas. De esa manera, el cubano Aroldis Chapman tenía el récord “oficial” de las Grandes Ligas al cronometrar 105.1 millas por hora en 2010 vistiendo la franela de los Rojos de Cincinnati.

Pero ayer, 20 de abril de 2016, el guardabosque izquierdo de los Yankees, Aaron Hicks, rompió el récord oficial de Chapman cuando ejecutó un disparo desde el bosque izquierdo para sacar en el plato a Danny Valencia (Oakland), que intentaba anotar desde tercera en pisa y corre.  MLB's Statcast registro el lance de Hicks en 105.5 millas por hora. Resulta  sorprendente, además, que el “lanza llamas” de Hicks se produjo desde el bosque izquierdo y no desde una loma de lanzar. El lance de Hicks recorrió 246' 6", mientras que la distancia de la loma de lanzar al plato es de 60' 6".

Véase la jugada en:
http://m.mlb.com/video/topic/73955164/v606604783/oaknyy-hicks-unleashes-1055mph-throw-home-for-out

lunes, 18 de abril de 2016

Cesáreo “El Toro” Márquez

          Cesáreo Márquez, llegó a Los Montañeses de Utuado, en el 1966 y se adueñó de la 3ra base que en esos momentos, era defendida por José Luis Pagán.   Inmediatamente, su bate se hizo sentir y en ese 1966, se proclamó Campeón de Bateo a Nivel Nacional cuando conectó 43 incogibles en 94 turnos, para un robusto promedio de .457.  De esa manera se convirtió en el primer jugador de Utuado, en obtener el título de Bateo a Nivel Nacional. Desde entonces, han transcurrido 50 años de esa gesta.  Como si fuera poco, ese mismo año fue colíder en Jonrones en Puerto Rico con 6 y tercero en incogibles con 43.  Dicho sea de paso el líder en incogibles en el 1966, lo fue el fenecido Víctor “Peladilla” González, quien conectó 45.  El único otro jugador de Utuado que ha obtenido el Título de Bateo a Nivel Nacional lo es José “Pipe” López, cuando en el 1995 bateó para .443 (88-39).

En el 1967, Cesáreo, bateó para .320; en el 1968, .301; en el 1969, .339; en el 1970, .366; en el 1971, .333 y en el 1972, .392.  Como podemos ver Cesáreo, durante siete temporadas consecutivas bateó arriba de los .300. 

En el 1970 cuando Utuado obtuvo su Segundo Campeonato Nacional, además de batear .366, en la Serie Regular, conectó 7 cuadrangulares para ser nuevamente colíder en jonrones en Puerto Rico.  Además, anotó 25 carreras, empujó 18 y fue declarado el Jugador Más Valioso del Noroeste.  En la Semifinal del Noroeste  frente a Manatí, tuvo promedio de .417.  Frente a Vega Baja, en la Final Seccional, bateó para .450.  En la Semifinal del Carnaval de Campeones frente a Río Piedras “Goya” bateó para .367 y en la Final Nacional frente a Cayey su promedio fue de .235.   En la post-temporada del 1970, bateó para .367 (79-29), una milésima más que la temporada regular (.366).

Fue precisamente, en la Semifinal Nacional frente a Río Piedras “Goya”, que su bate tronó sensacionalmente.  Utuado perdía aquella memorable Serie frente a Río Piedras “Goya”, 3 a 1 y en ese escenario, en una doble cartelera celebrada en Utuado, el domingo, 18 de octubre de 1970, conectó 3 cuadrangulares y empujó 8 carreras en la doble de victoria de Utuado frente a Río Piedras, 15 a 8 y 9 a 4.  En el primer juego conectó 2 jonrones y empujó 7 de las 14 carreras de Utuado.  El primer cuadrangular se produjo en el segundo episodio, cuando la sacó de línea por el Bosque Central Derecho con 3 corredores en base (Grand Slam).  El segundo, se produjo  en la tercera entrada con dos corredores en base.  Su tercer cuadrangular, lo conectó aquel inolvidable domingo, en la 7ma entrada del segundo juego sin nadie en base, frente a Carlos Lowell.

Esa doble victoria provocó el empate de la Serie y obligó a un séptimo y decisivo partido que se celebró el miércoles, 21 de octubre de 1970, en el Hiram Bithorm.  En aquel histórico partido, Utuado con Sandalio Quiñones en la loma, derrotó 2 a 0, a Carlos Lowell y a Río Piedras “Goya”.  Sandalio solamente permitió 3 hits y 2 de ellos se los conectaron en la primera entrada.  Carlos Lowell, sostuvo un duelo emocionante hasta la 7ma entrada cuando le marcaron 2 carreras.  Hasta esa entrada Lowell había permitido 2 hits y había ponchado siete Montañeses.  La entrada la inició Julio Mercado con un sólido sencillo de línea al derecho.  Enrique “Machicote” Yambó, lo llevó a segunda con toque de sacrificio y el prometedor y fenecido jardinero corto Luis González, conectó sencillo de línea sobre la cabeza de Lowell, empujando a Mercado con la primera carrera.  Luego, incogible del receptor Ramón Villafañe trajo a González al plato, con la segunda carrera del desafío.  En la octava entrada Cesáreo le conectó un doble contra la verja del jardín derecho, a Carlos Lowell que lo voló del cajón.  Cesáreo y Julio Mercado fueron los mejores bateadores de Utuado en ese decisivo encuentro,  con 2 hits en 4 turnos.

La extraordinaria ofensiva de Cesáreo en esos últimos tres juegos de la Serie frente a Río Piedras fue decisiva para que Utuado pudiera pasar a la Final Nacional y proclamarse Campeones de Puerto Rico.  

En el 1975, pasó a jugar con los Metropolitanos de Guaynabo y en 3 de las 6 campañas con esa novena, bateó sobre los .400.  En el 1975, su promedio fue de .490, pero no tuvo las apariciones al plato reglamentarias, para proclamarse Campeón de Bateo por segunda ocasión en su carrera; el título de Bateo recayó ese año, en Johnny Martínez de Guayama, con promedio de .440.  Nótese, que el promedio de Cesáreo fue de 50 centésimas mejor que el de Martínez.   En el 1978, bateó para .438, con 29 anotadas y 30 empujadas.  En el 1979 bateó para .422.  En el 1981, pasó a Comerío y se retiró en el 1984.  Su promedio de por vida en la Doble A fue de .342, conectó 457 incogibles, anotó 317 carreras y empujó 248.  En el 1978, representó a Puerto Rico en los XIII Juegos Centroamericanos y del Caribe, celebrados en Medellín, Colombia y fue el segundo mejor bateador entre los puertorriqueños.  Curiosamente, el líder de bateo del equipo de Puerto Rico fue Johnny Martínez con .451 y Cesáreo llegó segundo con .450. En ese certamen, Puerto Rico obtuvo la medalla de Bronce. 

Cesáreo era un jugador extremadamente fornido; por ello lo apodaron “El Toro”.  Sin embargo, era un jugador extremadamente rápido.  Pocos saben que fue corredor de 100 metros en la Escuela Superior.  Su velocidad se incrementaba en el corrido de “home” a primera.  Tan pronto su bate hacia contacto con la bola, iniciaba su veloz recorrido hacia primera, hasta el punto que considero que es el bateador derecho más rápido de “home” a primera que he visto en el equipo de Utuado, con respeto a otro de los grandes, Ángel “El Rayo” Núñez.  Esa virtud le permitió apuntarse múltiples “infield hits”.

En el 1994, fue exaltado al Recinto de los Inmortales del Béisbol Aficionado, junto a René “El Búfalo” Acevedo, entre otros.

Definitivamente, Cesáreo Márquez, es uno de los grandes jugadores de nuestro mítico equipo, en el béisbol Doble A.


¡En Hora Buena!