miércoles, 24 de julio de 2019

EL PROMETEDOR POTENCIAL DE “LOS MONTAÑESES”


Florida eliminó a Utuado vía barrida (4-0) en la Final del Norte. Sin embargo, durante la insólita barrida, “Los Montañeses” demostraron su enorme y esperanzador potencial para las venideras campañas. Tildo de insólita la barrida de los “Titanes” porque como norma, el equipo que barre una serie debe dominar los aspectos importantes del juego: bateo, picheo y defensa. Si no domina el bateo, debe dominar el picheo. Por ende, ganar una serie vía barrida sin dominar ni el bateo ni el picheo es inusual e insólito. Pues sepan que Utuado dominó a Florida en bateo y picheo. ¿Cóóómo? Así fue. Por ello, mi adjetivo, insólita barrida. Veamos.

Ofensiva

En los últimos tres juegos, Utuado bateó más “hits” que Florida (12-11, 15-8 y 12-8). En esos tres desafíos, Utuado conectó 39 incogibles contra 27, Florida. Aun así, Florida ganó esos tres juegos (7-4, 7-6 y 7-6) porque 12 de las 21 carreras que anotaron fueron inmerecidas. Sí, el 57% de esas 21 carreras se produjeron gracias al desplome defensivo de Utuado que venía de cometer solamente dos errores en la semifinal frente a Camuy.

El promedio de bateo de Utuado en la serie fue de .295 contra .290 de Florida. Se conectaron tres jonrones que salieron de los bates de “Toño” Candelaria (2) y Ángel Boria (1); Florida no conectó jonrones. Utuado conectó más extrabases que Florida (10-9). También, Utuado superó a Florida en “slugging” (.404 contra .359). Además de esas irrefutables estadísticas, los que vieron la serie fueron testigos de los múltiples batazos sólidos de los “Montañeses” que, por “mala suerte”, fueron a parar a los guantes del contrario o capturados por las joyas defensivas de Florida.

Picheo

El promedio de efectividad del cuerpo monticular de Utuado (4.24) fue superior al de Florida (4.50). En la serie, Florida anotó 27 carreras y Utuado 18. Sin embargo, todas las carreras permitidas por los lanzadores de Florida (18), fueron limpias; mientras que 11 de las 27 carreras permitidas por los lanzadores de Utuado fueron inmerecidas. En otras palabras, a los lanzadores de Florida le anotaron 18 carreras limpias y a los de Utuado 16. Peor aún, las 11 carreras inmerecidas que anotó Florida en la serie decidieron los últimos tres juegos. Los lanzadores de Utuado poncharon 22 contra 20, los de Florida. A los lanzadores de Florida le batearon más “hits” (43) que a los de Utuado (38).

Entonces, la pregunta obligada es: ¿por qué Utuado no pudo ganar ni un solo juego en la serie? Respuesta: se desplomó su defensiva, no batearon oportunamente, sobresalió la defensa de Florida y la Dama de la Fortuna estuvo en el lado de los “Titanes”. Iniciando la serie, Utuado sufrió la baja de su valioso receptor Derek Santana al sufrir la fractura en un dedo. Para incrementar el maleficio de los “Montañeses", a mediados del tercer juego, se lesionó el receptor colegial Adbiel Morales (“hamstring”). Fueron bajas sensibles y protagónicas por la importante posición que defendían. Como si ello fuera poco, Utuado bateó para un raquítico .111 con corredores en posición de anotar. Mientras Florida se crecía en los momentos apremiantes al batear para .375 con corredores en posición de anotar. De hecho, Utuado dejó en tercera y segunda, las carreras del empate y la victoria en la novena entrada de los juegos 3 y 4. Para incrementar la mala fortuna, cuando en los momentos claves los “Montañeses" producían buenos batazos caían en los guantes de los “Titanes”. 


Defensa

Florida dominó ampliamente el importante renglón defensivo. Ese fue el elemento decisivo en la serie. La hermética defensa de los "Titanes", asestó la estocada, el “Jaque Mate” de la barrida.

Aun cuando Florida se vio obligada a utilizar a Francisco Tirado en tercera y a su bateador designado, Ángel “el Gallo” Rosa, en primera, el juego defensivo de ambos fue espectacular y clave. Florida cometió solamente dos errores en la serie, ambos del campocorto Gaby Roa y ninguno de ellos produjo carreras para Utuado. Por su parte, los Montañeses cometieron 12 errores, los que aprovechó Florida para anotar 11 carreras sucias. Los errores fueron claves en los últimos tres juegos, que muy bien pudieron ganar los Montañeses. En el segundo juego, dos errores defensivos en la cuarta entrada fue capitalizado por Florida, para marcar tres carreras decisivas. En el tercer juego tres errores de la defensa montañez le dieron la victoria a Florida.

Pero fue en el cuarto juego donde la defensa de Utuado sentenció la barrida. Un error (en tiro) del eficiente Ramón Agosto en la misma primera entrada provocó que Florida anotara cuatro carreras sucias. Pero ello no quedó ahí. En la cuarta entrada, Florida anotó bizarramente su séptima y decisiva carrera en una jugada que ilustró el desplome defensivo de los “Montañeses”. A la altura de la cuarta entrada corría en primera con dos “outs”, Gaby Ayala y bateaba en conteo de dos bolas y un “strike”, Ángel “el Gallo” Rosa. Lanzaba por Utuado, Allan Sánchez. Y, ante las lesiones de Derek Santana y Aby Morales, fungía como receptor el tercera base y guardabosque Emanuel “el Gringo” García. El próximo lanzamiento fue bola, lo que colocó el conteo del “Gallo” Rosa en tres bolas y un “strike” (3-1). Ahí fue que comenzó la “bizarra jugada”. Gaby Ayala, creyendo que Rosa había recibido base por bolas, se fue caminando de primera para segunda; un error mental del contrario que debió capitalizar Utuado para cerrar la entrada en cero. El receptor García se percató del error mental de Ayala, se adelantó a la loma de lanzar y lo atrapó entre primera y segunda. Ayala optó por seguir para segunda y daba la impresión que lo sacarían "a media calle". Pero, el tiro de García fue altísimo y la bola fue a parar a la pradera central. Ayala siguió para tercera, mientras en el central Luis Cortés mofaba la bola varias veces antes de devolverla al cuadro. El “coach” de tercera base de Florida, le ordenó a Ayala detenerse y éste se detuvo momentáneamente. Cuando el tiro de Cortés fue recibido por “Toño” Candelaria detrás de la loma de lanzar, Ayala emprendió carrera para el plato en otro corrido que aparentaba ser suicida. Al percatarse, “Toño” hizo un tiro al plato que, de haber sido certero, “le hubiese hecho un homenaje” esta vez en el “Home” a Gaby Ayala. Lamentablemente, el tiro de “Toño" fue errático y paró contra la pared de las gradas. Nunca había visto una secuencia de jugadas tan erráticas como ésta; un error mental del contrario acompañado por tres errores de la defensa. Después de todo, "en el béisbol no todo está escrito”.

A todas luces, Utuado muy bien pudo haber ganado tres de los cuatro juegos, pero ese es el béisbol. Como reza el adagio: “El que va a ganar no pierde y viceversa”.

Ahora bien, me quito el sombrero y aplaudo, puesto de pie al talentoso y prometedor equipo de los “Montañeses”. Los jóvenes Derek Santana, Jorge Guzmán, Abdiel Rodríguez, Adbiel Morales, Emanuel Ríos, Ramón Agosto, Kevin Rolón, Emanuel García, Fernando Ortiz... son los rostros entre los jugadores de posición del enorme potencial de los Montañeses. Por su parte, los jóvenes lanzadores de mucha valía, Emanuel Reyes, Chris Galarza, Jaime García, Mathew Montero, Allan Sánchez, Gabriel Rosado, Ian Torres, Luis Mercado y Ricardo López…, deben guiar a los “Montañeses” al Carnaval de Campeones, el año que viene.

Ciertamente, los “Montañeses” nos brindaron alegrías y entusiasmo en el 2019. Felicito a su apoderado Rafael Juarbe Pagán, a la Junta de Directores y al cuerpo técnico por el excelente trabajo. Ahora nos corresponde a nosotros, los fanáticos, respaldar económicamente a un equipo tan promisorio. ¡¡¡EN HORA BUENA!!!