viernes, 16 de enero de 2015

EL SISTEMA DE ARBITRAJE SALARIAL EN EL BÉISBOL DE GRANDES LIGAS


El arbitraje salarial es un sabio proceso al que se someten un jugador y su equipo para determinar el salario que devengará el pelotero.

Su origen se remonta al Convenio Colectivo de 1973-1975.  En esa ocasión se le otorgó ese derecho a todos los peloteros que tuviesen, al menos, 2 años de servicio en las Grandes Ligas.

En el Convenio Colectivo 1985-1989 se aumentó de 2 a 3 los años de servicios en Grandes Ligas para poder tener derecho al arbitraje salarial.  

En el Convenio Colectivo 1990-1993 se enmendó el concepto y por excepción, se extendió el arbitraje salarial al 17% de los mejores jugadores por posición que tuviesen, al menos, 2 años de servicio y  86 días de servicio en el año anterior al arbitraje. Ese grupo se conoce como los Súper Dos. En el último Convenio, entre el Sindicato de Peloteros de Grandes Ligas y MLB firmado en el año 2012, se amplió el grupo conocido como Súper Dos y actualmente el 22% de los mejores jugadores por posición que tengan al menos 2 años de servicio y  86 días de servicio en el año anterior al arbitraje también cualifican para solicitar arbitraje salarial.

El derecho al arbitraje salarial se extiende hasta que el pelotero tenga derecho a declararse agente libre. Un jugador tiene derecho a declararse Agente Libre cuando cumple 6 años de servicio en Grandes Ligas.

El lugar donde se efectuará la audiencia será seleccionado por las partes, preferiblemente en las ciudades de Orlando, Tampa, Phoenix o Los Ángeles, ya que para esta época del año (febrero), los equipos efectúan los entrenamientos previos a la temporada en los estados de Florida y Arizona.

Los árbitros son escogidos entre una lista de notables y prominentes árbitros profesionales suplida por la Asociación  Americana de Arbitraje. Para cada audiencia, se designa un panel compuesto por tres árbitros y entre ambas partes seleccionan al presidente del panel. Una vez constituido el panel, se fija la fecha de la vista.

Los argumentos presentados por las partes en la audiencia son estrictamente confidenciales y no podrán ser divulgados bajo ninguna circunstancia. En cuanto a los costos del proceso, cada parte asumirá los gastos en que incurra en la presentación de su caso.

En este proceso, cada parte presenta una propuesta salarial al panel de árbitro. Luego de analizar la prueba sometida, el panel de árbitros determinará cuál de las dos opciones resulta más justa. En base a ello, fijará el salario correspondiente. Ahora bien, el panel de árbitros viene obligado a escoger una de las dos propuestas salariales, la del equipo o la del jugador, por lo que está impedido de fijar, un punto medio entre ambas propuestas.

La decisión deberá ser tomada por el panel al concluir la audiencia o en su defecto, dentro de las 24 horas siguientes a la finalización de la misma.

La decisión será definitiva, ya que las partes renuncian a su derecho a cuestionarla. 

Es menester resaltar, que las partes siempre tienen el derecho de llegar a un acuerdo en cualquier momento antes de que se celebre la vista o antes de que el panel tome la decisión, extinguiendo de esta manera el procedimiento de arbitraje.

Desde que comenzó el proceso en 1974, se han celebrado 508 audiencias. Las propuestas de los equipos han sido favorecidas en 293 ocasiones (58%) y la de los peloteros en 215 (42%); (293-215).

viernes, 9 de enero de 2015

EL “DREAM TEAM” DE PUERTO RICO DE 1995 Y LAS SERIES DEL CARIBE



La Serie del Caribe 2015, le será dedicada al muy recordado y añorado “Dream Team” de Puerto Rico de 1995.  Precisamente, este año se conmemora el vigésimo aniversario de aquella gesta y la justa dedicatoria es la génesis de este artículo en el que hago un recuento del extraordinario desempeño de aquella novena. Veamos.

La Serie del Caribe nació en el Gran Stadium de la Habana, conocido también como “Estadio del Cerro” en el 1949 y colapsó en 1960, cuando se prohibió el béisbol profesional en Cuba.

En esa primera etapa participaron Cuba, Panamá, Venezuela y Puerto Rico. Se efectuaron 12 series caribeñas y Cuba logró ganar 7 de ellas. Los campeones cubanos de esos años fueron los clubes, Tigres de Marianao (2), Alacranes de Almendares (2), Leones de la Habana (1) y Elefantes de Cienfuegos (2).  Puerto Rico se anexó 4 con Los Cangrejeros de Santurce (3) y Los Criollos de Caguas (1) y Panamá uno con el Carta Vieja.

Año
Sede
Campeón
Dirigente
Récord
Fermín Guerra
6-0
Wayne Blackburn
5-1
George Scales
5-1
Miguel González
5-0
Buster Clarkson
5-0
Mickey Owen
4-2
Herman Franks
5-1
Óscar Rodríguez
5-1
Napoleón Reyes
5-0
Napoleón Reyes
4-2
Sungo Carrera
5-0
Tony Castaño
6-0

En 1970, las ligas venezolana, dominicana y puertorriqueña decidieron reactivar las Series del Caribe y ahí surgió lo que se conoce como la Segunda Etapa del Clásico Caribeño.  Al año siguiente, 1971, se unió México. Mientras, tras 53 años de ausencia, Cuba regresó a la Serie del Caribe el año pasado. Aunque la actuación de Villa Clara-equipo representativo de la tierra de Martí fue para el olvido, la mera presencia de Cuba, le dio realce al evento.

En esta segunda etapa 1970-2014, la República Dominicana ha sido el país más exitoso, con 19 títulos, luego le siguen Puerto Rico con 10, México con 9 y por último, Venezuela con 7. En 1981 no hubo Serie por una huelga de jugadores.

La Serie del Caribe de este año tendrá como escenario a la Isla del Encanto, a su capital San Juan Bautista y al estadio Hiram Bithorn. Por 13ra. ocasión, Puerto Rico será la sede del evento. Además, será la 10ma. ocasión que la Serie se celebra en San Juan y la 7ma. en el Estadio Hiram Bithorn. En la Primera Etapa se celebraron tres Series en el legendario Estadio Sixto Escobar. Las otras tres Series en que Puerto Rico ha fungido como anfitrión, se produjeron en el Roberto Clemente de Carolina, dos veces (2003 y 2007) y en el Isidoro “Cholo” García de Mayagüez, en el 2011.

LA SERIE DEL CARIBE DE 1995

Los Senadores de San Juan se proclamaron campeones en la temporada 1994-95 de la Liga de Béisbol de Invierno de Puerto Rico y se ganaron el derecho de representar a Puerto Rico en la Serie del Caribe de 1995.

La Serie que reunió a los monarcas de Venezuela, República Dominicana, México y Puerto Rico se escenificó en el Hiram Bithorn.   

Con la intención de conquistar el cetro y festejar en casa, decidieron armar el mejor equipo posible. Para orgullo de los fanáticos senadores y para nosotros los puertorriqueños, se estructuró un equipo con destacadas figuras de Grandes Ligas que se ganó el calificativo de “Dream Team” o “Equipo de Ensueño”.

Roberto Alomar, Juan “Igor” González, Carlos Baerga, Edgar Martínez, Bernabé “Bernie” Williams, Rubén “El Indio” Sierra, Carmelo Martínez, la joven promesa Carlos Delgado y el campo corto Ray Sánchez, conformaron la temible alineación borincana. 

Ricky Bones y Roberto Hernández encabezaron el cuerpo de lanzadores, que no estaba en sintonía con el nivel superlativo de la ofensiva. Pero aun cuando el cuerpo monticular no era de "ensueño" como lo era la alineación, contaba con sólidos iniciadores: Ricky Bones, Doug Brocail, Eric Gunderson y Chris Haney, y un cerrador de primera línea, Roberto Hernández, que en aquel momento era el apagafuegos de los Medias Blancas de Chicago.

Un simple vistazo a las estadísticas que estos peloteros habían acumulado para ese entonces en el béisbol de Grandes Ligas, validaba y justificaba el seudónimo.

Roberto Alomar, acumulaba 7 temporadas en las mayores y en su currículum vitae tenía 5 Juegos de Estrellas y cuatro Guantes de Oro como segunda base. Además, dos títulos de Serie Mundial con los Azulejos de Toronto (1992 y 1993) y tres años bateando por encima de los .300.

Juan “Igor” González simbolizaba el poder. El jardinero había sido el líder en jonrones de la Liga Americana en 1992 con 42 y en el 1993 con 46, empatando ese año la marca para un puertorriqueño, que ostentaba Orlando “Peruchín” Cepeda, quien en 1961, también había conectado 46 cuadrangulares.  Igor llevaba 6 temporadas con Texas y en tres de ellas había impulsado más de 100 carreras.  Al año siguiente, 1996,  fue el Más Valioso en La Americana, cuando acumuló 47 cuadrangulares, 144 remolcadas y promedio de .314.

Edgar Martínez era otra de las figuras con vasta experiencia en la pelota de Grandes Ligas. Llevaba 8 campañas en el “Big Show”. En el 1992, fue líder de bateo en la Americana (.343) y en dobles con 46.  Ese mismo año de 1995, tras disputar la Serie del Caribe, tuvo quizás su mejor año en las mayores al proclamarse campeón de bateo (.356) y comandar los renglones de dobles (52) y anotadas (121).

Carlos Baerga era otra pieza cimera. Tres Juegos de Estrellas, un bate de plata, dos contiendas con más de 100 empujadas y tres bateando arriba de los .300.  En el 1992, conectó 205 “hits” y en el 1993 conectó 200 incogibles.

Bernie Williams comenzaba a destacarse como jardinero central de los Yankees y ese año de 1995, bateó en Grandes Ligas para .307; la primera de 8 temporadas consecutivas bateando sobre .300 en las Mayores.

Rubén “El Indio” Sierra era el más experimentado; llevaba 9 temporadas en Grandes Ligas, había participado en 4 Juegos de Estrellas, y había impulsado más de 100 carreras en 4 campañas.

Carlos Delgado comenzaba a dar destellos de lo que le deparaba el futuro y fue el receptor de la novena. Concluyó su carrera en las Mayores con 473 cuadrangulares y 1,512 impulsadas.

Iván Rodríguez, sino el mejor, uno de los mejores receptores en la historia de Grandes Ligas y un coloso en los anales del béisbol puertorriqueño, no fue parte del “Dream Team” debido a una lesión en una rodilla.

Tal y como se anticipaba, los puertorriqueños ganaron invicto la Serie del Caribe al salir por la puerta ancha en sus 6 presentaciones. La tórrida ofensiva de Puerto Rico quedó evidenciada cuando marcaron 49 carreras en los 6 desafíos y sus lanzadores solamente permitieron 15; (49-15). Ni República Dominicana los pudo frenar, aun cuando contaron con jugadores establecidos en Grandes Ligas, como lo eran, Raúl Mondesí, Moisés Alou, Julio Franco, José Offerman y lanzadores de la talla de Pedro Martínez y José Rijo. No obstante, sus primeros dos triunfos frente a México y Venezuela respectivamente, se produjeron por el margen mínimo de una carrera.

Roberto Alomar, líder de bateo (.560) y carreras anotadas (10), fue seleccionado el Jugador Más Valioso de la Serie. Bernie Williams fue líder en bambinazos con 3.   

El equipo de boricua alineó de la siguiente manera: Roberto Alomar en segunda, Edgar  Martínez (designado), Carlos Baerga (tercera), Carlos Delgado (receptor), Juan "Igor" González (bosque izquierdo), Rubén "El Indio" Sierra (bosque derecho), Bernie Williams (bosque central), Carmelo Martínez (primera base) y Rey Sánchez (campo corto). 

resumen de los juegos del “Dream Team”

1er juego: Derrotaron  6-5  a los Naranjeros de Hermosillo de México. Inició el partido Ricky Bones, lo relevó José Alberro, quien se anotó el triunfo y hubo juego salvado para Roberto Hernández. A la ofensiva, Roberto Alomar se fue de 3-1 con jonrón de tres carreras y Carlos Delgado también la desapareció. 

2do juego: En un juego, no apto para cardiacos, y que se extendió a 10 entradas, Puerto Rico dejó sobre el terreno de juego a Los Leones de Caracas, Venezuela, cuando con tres en base, el relevista venezolano Ugeth Urbina, le otorgó boleto gratis a Carlos Delgado, anotando Elam "Ricco" Rossy, que había entrado a correr de emergente por Carmelo Martínez, la carrera de la victoria. El juego concluyó con marcador de 3 a 2. Raffy Montalvo obtuvo la victoria en relevo. El mejor a la ofensiva lo fue Roberto Alomar, 4-2 (un doble).

3er juego: En este encuentro los bates boricuas tronaron contra el iniciador dominicano Pedro Martínez y contra los relevistas que vinieron en su auxilio.  Con un ataque de 17 inatrapables los boricuas apabullaron 16-0 a los Azucareros de Este de la República Dominicana. A la ofensiva se destacaron Roberto Alomar (6-5), Edgar Martínez (6-3), Rubén Sierra (4-2) y Carmelo Martínez (3-1) (jonrón). El lanzador ganador fue Doug Brocail que lanzó 7 sólidas entradas con 7 ponches y permitió 3 hits. Fue relevado por Edwin Corps y John Burgos. Por Dominicana perdió Pedro Martínez que lanzó 4 entradas, permitió 4 hits y anotaron 3 carreras y recetó 4 ponches.

4to juego: Vencieron 6-1 a México. Roberto Alomar y Carmelo Martínez se fueron para la calle. La ofensiva de Puerto Rico estuvo colosal con Bernie Williams (4-3) (jonrón), Juan "Igor" González (4-2) y Edgar Martínez (5-2). El lanzador Eric Gunderson se llevó la victoria trabajando 8 entradas y Roberto Hernández se encargó de cerrar el partido.

5to juego: Puerto Rico, derrotó 9-4 a Los Leones de Caracas. Juan "Igor" González y Rubén Sierra le pusieron música al 5to. partido cuando conectaron cuadrangulares para encabezar un ataque de 16 inatrapables. José Meléndez fue el lanzador ganador y relevaron, Rafy Montalvo y José Alberro. Los mejores bateadores por Puerto Rico fueron Carlos Baerga (3-3), Edgar Martínez (5-3) y Roberto Alomar (4-2). Por Venezuela Omar Visquel (4-3), Luis Sojo (3-2).

6to juego: Doblegaron 9-3 a Dominicana. En ésta última fecha los boricuas desplegaron un ataque de 14 hits frente a Dominicana para terminar invictos y proclamarse campeones de la Serie del Caribe de 1995. La ofensiva de Puerto Rico volvió a tronar y fue encabezada por Bernie Williams (5-3), quien conectó dos cuadrangulares, Juan "Igor" González (jonrón), Rey Sánchez (3-3), Edgar Martínez (4-2) y Roberto Alomar (3-2). Ganó el partido Ricky Bones, quien lanzó 6 entradas y fue relevado por José Alberro y Roberto Hernández. Por Dominicana inició y perdió José Rijo. Carlos Pérez, Melquiades Rojas y Yorkis Pérez, también desfilaron por el montículo de Dominicana.

Carlos Baerga desempeñó un rol estelar en uno de los equipos de Grandes Ligas más dominantes durante esa década de los 90, los Indios de Cleveland. Precisamente, ese año de 1995, Cleveland terminó con el mejor récord en ganados y perdidos en La Gran Carpa, 100-44. Sin embargo, Baerga declaró en una entrevista que ése no fue el mejor equipo en el que jugó. Baerga señaló que la mejor escuadra de la que formó parte fue el "Dream Team" que representó a Puerto Rico en el Clásico Caribeño de 1995. Como dice el adagio popular: “Más claro no canta un gallo”.

EL ITINERARIO CONFECCIONADO PARA EL MAGNO EVENTO

Lunes, 2 de febrero, a la 1:05 PM, Cuba enfrentará a México. A la 6:30 PM se efectuará la ceremonia de apertura en la cual se honrará al “Dream Team”. A las 7:30 PM, Venezuela jugará contra Puerto Rico.

Martes, 3 de febrero, República Dominicana debutará enfrentando a Cuba a la 1:05 PM. A las 7:30 PM, Puerto Rico enfrentará a México.

Miércoles, 4 de febrero, el choque de la 1:05 PM será entre República Dominicana y Venezuela. A las 7:30 PM, un clásico: Cuba vs. Puerto Rico.

Jueves, 5 de febrero, a la 1:05 PM, Venezuela chocará contra Cuba. A las 7:30 PM,  México vs. República Dominicana. Puerto Rico descansa este día.

Viernes, 6 de febrero, México enfrentará a Venezuela a la 1:05 PM. A las 7:30 PM, el esperado encuentro entre República Dominicana y Puerto Rico.
Al cabo de estos partidos, los cuatro equipos con mejores récords adelantan y el que llegue quinto quedará eliminado.

Sábado, 7 de febrero, y en los mismos horarios, se celebrarán dos semifinales; el que arribe primero jugará con el de la cuarta posición y el segundo con el tercero.

Domingo, 8 de febrero, a las 5:30 PM, los ganadores de los partidos del sábado (semifinal) disputarán la corona.

Disfrutemos, pues, de una atractiva Serie del Caribe que nos brindará, además, la oportunidad de vitorear nuevamente a nuestros HÉROES.