Las dificultades y
los éxitos fueron compañeros inseparables de los “Montañeses” durante la
Temporada del 2012. Por primera vez en
su largo historial, comenzaron la campaña huérfanos de apoderado. Ello creó desasosiego entre los jugadores,
angustias entre sus fieles fanáticos y honda preocupación en el seno de la
Federación de Béisbol por la importancia que reviste el equipo para el ente
federativo. Esa engorrosa situación pudiera
catalogarse como el mayor obstáculo de la novena utuadeña en su rico
historial. Definitivamente, la operación
económica del talentoso equipo, es compleja y cuesta arriba. Afortunadamente, tres entusiastas
colaboradores del equipo: Jorge Vázquez, Pedro “Rocky” Soto y Jani Guzmán, asumieron
la difícil encomienda de administrarlo y esa gesta tiene que ser valorada y
aplaudida por todos nosotros los fanáticos utuadeños. Sus gestiones fueron exitosas y así quedó
evidenciado en los logros alcanzados.
En el terreno del juego, la ruta de
los “Montañeses”, estuvo marcada por las rachas… en ocasiones por la ruta de la
victoria y en otras, por la ruta de las derrotas. Iniciaron ganando los primeros cinco juegos
de la Temporada Regular. Posteriormente,
entre el 17 de marzo y el 8 de abril, perdieron cuatro juegos al hilo colocando
su récord en esos momentos en seis victorias y seis derrotas (6 y 6). Esa racha negativa provocó la dimisión del
dirigente Luis “Buzo” Cintrón. A partir
de entonces, Edwin García asumió las riendas del conjunto y eventualmente
Utuado arribó en la segunda posición de la Sección Norte con marca de doce
victorias y ocho derrotas (12-8). Se
destacaron entre otros jugadores el recién llegado Jensen Fonseca quién se
proclamó Campeón de Bateo del Norte, Antonio “Tonito” Acevedo, Líder en Efectividad
del Norte (1.13) y Juan Padilla, quién concluyó con marca de cuatro victorias,
una derrota y 1.19 de efectividad.
Enfrentaron
en la Semi Final B, a los “Atenienses” de Manatí. La serie fue reñida y se
extendió al máximo de cinco juegos. El
partido decisivo se celebró el viernes, 15 de junio, en el Parque Ramón Cabañas
de Utuado, ante casa llena. En ese
decisivo encuentro, los “Montañeses” derrotaron a Manatí con marcador de tres
carreras por una (3x1). El derecho Juan
Padilla ganó el desafío al lanzar las nueve entradas y de paso, se apuntó las tres victorias de Utuado en la
Serie.
Luego, enfrentamos
a los “Arenosos” de Camuy por el Título del Norte. Fue también una serie reñida, dramática y
memorable que se extendió al máximo de siete (7) juegos. Tres de los partidos concluyeron con el mismo
marcador de tres carreras por dos (3x2). Precisamente, el séptimo y decisivo partido
se celebró el viernes, 27 de julio, en
el Parque Ramón Cabañas y Utuado salió por la puerta ancha con marcador de tres
carreras por dos (3x2). Ese partido generó mucho entusiasmo entre los
fanáticos de Camuy, de Utuado y de toda la Región. Más de 3,500 fanáticos colmaron las tribunas
del Ramón Cabañas, en la que considero la mayor asistencia a un juego de pelota
en Utuado. En las gradas el ambiente era exquisito y tenso. En el terreno del juego, tal y como se
esperaba, un gran duelo entre el juvenil Tomás Rodríguez por Camuy y el diestro
Juan Padilla por Utuado. El partido
llegó sin anotaciones hasta la séptima entrada.
En la parte alta de la séptima, Camuy marcó dos carreras inmerecidas y
tomó el comando dos carreras por cero (2x0).
Mientras, en la parte baja de la séptima, el joven Tomás Rodríguez, le colgaba
un cero más en la pizarra a los “Montañeses”.
Al entrar a la octava entrada, las dos carreras de ventaja de Camuy
pesaban muchísimo. Sin embargo, en la
segunda del octavo ocurrió lo inesperado, el juvenil Tomás Rodríguez no salió a
lanzar por Camuy. En su auxilio subió a
la lomita de los suspiros el relevista zurdo Orvil Avilés, quién procedió a
propinar el primer “out” de esa entrada y acto seguido dio paso al relevista
derecho Héctor Plaza, quien procedió a ponchar a Ian Texidor para el segundo
“out”. En ese momento la entusiasta y numerosa
fanaticada de Camuy cantaba a coro: “Cuatro “outs” más y no jugamos más”. Mientras la fiel y consecuente fanáticada de Utuado,
encabezada por su animador (cheerleader) Willie Picón, replicaba “Utuado no se
quita; Utuado no se quita”. Dentro de esa algarabía, vino al cajón de
bateo Luis Cortés, quién había conectado 3 “hits” en 3 presentaciones al plato
y en conteo de 2 “strike” y 1 bola, abanicó la brisa en un lanzamiento en curva
que le había servido Héctor Plaza, para poncharse. Para sorpresa de todos, ocurrió lo
inesperado; lo que parecía ser el 3.er “out” de la entrada fue
el comienzo de una histórica pesadilla para Camuy. El lanzamiento en
rompimiento (“Wild Pitch”) con el cual se ponchó Luis Cortés, no pudo ser
manejado por el receptor de Camuy,
Carlos Rivera, lo que aprovechó Luis Cortés para correr como un bólido y,
cuando por fin el receptor encontró la pelota, ya Luis anclaba en la 2.da base.
El próximo bateador Carlos Claudio, en conteo de 3 bolas y 2 “strike” conectó
“hit” al predio izquierdo-central, empujando la primera carrera de
Utuado. Acto seguido, Jensen Fonseca recibió boleto gratis, lo que
provocó la salida del montículo del relevista Héctor
Plaza
Así concluyó
ese histórico partido. Con el atípico triunfo, Utuado se proclamó por cuarto año consecutivo Campeón del Norte.
Luego de las
dos reñidas series frente a Manatí y Camuy, Utuado pasó al Carnaval de
Campeones de la Liga Atlántico. Fue en el
Carnaval de Campeones del Atlántico que el incuestionable talento de los
“Montañeses” tuvo su mejor desempeño del año.
Aplastaron en cuatro juegos a los “Maceteros” de Vega Alta y luego, le
ganaron los primeros tres partidos de la Final del Atlántico a los
“Patrulleros” de San Sebastián. De esa
manera, Utuado tejió una racha de nueve victorias al hilo. Dos frente a Camuy,
(partidos 6 y 7 de la Final del Norte), cuatro frente a Vega Alta y tres frente
a San Sebastián. Como señalé al
principio, fue una Temporada de rachas y ésta fue su mayor racha de victorias
en el 2012. Eventualmente eliminaron en
cinco juegos a San Sebastián para proclamarse Campeones del Atlántico y de paso convertirse en el primer
finalista al Título Nacional.
La alegría, el entusiasmo, el optimismo y
la fe en el equipo era la orden del día en la Ciudad del Viví. Paradójicamente y, considerando el desempeño
de altas y bajas del equipo durante la Fase Regular, muchos fanáticos pensaron
que Utuado no revalidaría su Título del Norte.
Sin embargo, el enorme talento del equipo, el deseo de ganar de sus
jugadores, la extraordinaria labor de la gerencia y el apoyo incondicional de
su fanaticada, se combinaron para que los “Montañeses” alcanzaran la Final
Nacional.
En la serie por el Campeonato de Puerto
Rico, enfrentaron a los “Bravos” de Cidra, en lo que aparentaba ser una serie reñida. Lamentablemente, los “Bravos” nos barrieron
en cuatro juegos. En el primer partido,
Cidra se apuntó la victoria con marcador cinco carreras por tres (5-3). En ese primer desafío, Utuado tuvo muchas
oportunidades de revertir el marcador, pero dejaron once corredores en
base. El segundo partido culminó con una
dolorosa derrota cuando cayeron vencidos dos carreras por una (2x1). En ese desafío Juan Padilla lanzó las nueve
entradas permitiendo dos carreras y seis incogibles a la fuerte artillería de
Cidra. Sin embargo, el bateo oportuno de
los “Montañeses” volvió a brillar por su ausencia y dejaron diez corredores en
base. De hecho, en la octava entrada,
colocaron tres corredores en base con un solo “out”, pero no lograron anotar siquiera,
la carrera del empate. Luego de esa
derrota, el estado anímico de los “Montañeses” cayó en picada y los “Bravos” elevaron
aún más su nivel de juego. Como
resultado de ello, Utuado perdió cuatro juegos consecutivos y por ende, esa
racha, esta vez negativa, fue el capítulo final de una temporada de
ensueño.
El cuarto
partido de la serie se celebró en el Ramón Cabañas de Utuado. Cidra ganó ese partido con el abultado marcador de
diecisiete carreras por tres (17x3).
Cuando se produjo el último “out”, pocos fanáticos utuadeños permanecían
en las gradas del Ramón Cabañas. Los que
permanecimos, presenciamos el festejo de los “Bravos” de Cidra. No era un ambiente
agradable para nosotros, por el contrario amargo, pero fuimos testigos de un momento
histórico; por primera vez un equipo se proclamaba Campeón del Béisbol Doble A en suelo utuadeño. Ello fue así, ya que los tres campeonatos de
Utuado se produjeron en la carretera y de igual manera, sus dos Sub-campeonatos. Veamos.
Utuado obtuvo su primer Campeonato el 13
de septiembre de 1941 en la Liga del Castillo en Ponce, Puerto Rico. Lograron su segundo Campeonato el domingo, 8
de noviembre de 1970 en el Estadio Pedro Montañez de Cayey, y su tercer
Campeonato el domingo, 2 de septiembre de 2007, en el Parque Idelfonso Solá
Morales de Caguas.
Su primer Sub-campeonato
se produjo en el 1961, cuando cayeron derrotados ante los “Guerilleros” de Río
Grande, en un decisivo encuentro en el Parque Ovidio de Jesús de Río
Grande. Su segundo Sub-campeonato se
produjo en el 1986, cuando cayeron derrotados ante los “Toritos” de Cayey en el Estadio Ángel Luis
Correa de Cayey. El tercero, en el Parque Ramón Cabañas de Utuado, cuando caímos
derrotados ante los “Bravos” de Cidra.
Definitivamente, la Temporada
de los “Montañeses” en el 2012, fue una de las más exitosas en su
historia. Supieron afrontar y vencer las
adversidades. Obtuvieron grandes triunfos para el deleite de todos
nosotros. En fin, una Temporada que
perdurará por siempre en nuestras memorias.
De ahí, que no puede ser
definida por su desempeño en la Final Nacional. UNA
MALA SEMANA NO PUEDE EMPAÑAR Y MUCHO MENOS, BORRAR LOS LOGROS OBTENIDOS DURANTE
SIETE (7) MESES. POR EL CONTRARIO, EL
RESULTADO NETO ES QUE SOMOS LOS ACTUALES SUB CAMPEONES NACIONALES Y CAMPEONES DEL
ATLÁNTICO. Por todo ello, y por
medio de este INVENTARIO, reverentemente
expreso mi gratitud y reconocimiento a la
Gerencia del equipo, a sus jugadores y a la mejor fanaticada del Béisbol
Doble A, la de los “Montañeses” de Utuado.
